El pasado mes de octubre, con motivo de la boda de una amiga, tuve la ocasión de pasar un fin de semana en la Manga del Mar Menor, una zona de más de veinte kilómetros adentrándose en el mar, con altos rascacielos y una población ausente en los meses de invierno. Con vistas al Mar Mediterráneo y al Mar Menor, desde el Hotel Los Delfines **** teníamos unas vistas maravillosas.
Aguas transparentes, arena fina y un intenso olor a mar que nos hizo olvidar durante unos días que estábamos ya en otoño.