No sé cuántas veces he hecho ya este sendero y nunca me canso de su paisaje. He de reconocer que aún no he terminado la ruta completa que para mí sería todo un reto a superar. Pero sin hacer todo el camino, que requiere hacer noche (vivanqueo), disfruto del bello paisaje que nos regala el maravilloso entorno del Parque Natural de Sierra Nevada. Empezando en Güéjar Sierra o directamente desde el Río Maitena, el recorrido transcurre por el antiguo camino del tranvía, que aún conserva los túneles.
Salpicado de restaurantes y puentes, la ruta se hace de forma fácil en poco más de una hora, hasta el final del camino habilitado también para circular con vehículos.
Llegados al final, a unos 7 km de la localidad de Güéjar Sierra, cruzamos el Río Genil y emprendemos el ascenso durante unos cuantos kilómetros, por un camino que es en algunas ocasiones estrecho y serpenteante. En esta ocasión, sólo llegamos hasta el gran castaño, llamado «el Abuelo», que se convirtió durante un buen rato en nuestro lugar de relax y descanso, antes de emprender el regreso. En total hicimos unos 15 km de ruta, que no estuvieron nada mal para pasar un gran domingo disfrutando del buen tiempo.
En estas fechas, a pocos días de comenzar oficialmente la primavera, Sierra Nevada luce espléndidamente blanca iluminando con su belleza toda Granada. El camino, entre rocas, estaba salpicado de almendros en flor que llenaban de color el paisaje.
Se trata de un precioso sendero recomendado en todas las épocas del año pero que en estas fechas es espectacular.