El municipio granadino de Santa Fé cuenta con 524 años de historia a sus espaldas, entre ellos, la época de sus famosas Capitulaciones. Actualmente se trata de unas fiestas declaradas de Interés Turístico Andaluz que conmemoran la firma del documento que otorgaba el permiso por parte de los Reyes Católicos a Cristóbal Colón para emprender su viaje a las Indias.
A escasos kilómetros de la capital nazarí, este municipio fue un enclave estratégico de gran importancia para los ejércitos y su construcción original se realizó siguiendo los patrones urbanísticos de un campamento militar, con varias torres de vigilancia que actualmente se conservan y que suponen un testigo vivo de nuestra historia.
Con motivo de la Capitulaciones se organizan una serie de actos y actividades que trasladan al visitante a la época medieval.
El mercado medieval es sin lugar a dudas uno de sus grandes atractivos, con cientos de puestos de artesanía, alimentos y todo tipo de artículos. Todos los mercaderes van ataviados con las vestimentas propias de la época y hacen que te traslades a otros tiempo.
Para conocer de primera mano la historia de la localidad, decidimos participar en las visitas guiadas teatralizadas que ofrecían desde la Oficina de Turismo. Y las recomiendo. Primero porque son una magnífica forma de conocer los detalles históricos que se conmemoran de una forma amena y divertida. Y en segundo lugar, porque no es lo mismo visitar las cuatro puertas de la ciudad con un simple guía, que hacerlo entre mendigos, charlatanes y otros personajes de la época. Tras estas representaciones dramatizadas hay un gran trabajo de preparación que merece ser reconocido. Así pudimos conocer los orígenes de la localidad, su función en la época de los Reyes Católicos y visitar las puertas que albergan en su interior pequeños santuarios religiosos. La Puerta de Jaén, la Puerta de Sevilla, la Puerta de Loja y la Puerta de Granada conservan su lugar estratégico y son un aliciente histórico para visitar Santa Fé y conocer a través de ellas su pasado. (Leer más).
Así que nuestra visita comenzó con un largo paseo por el mercado medieval y la visita a las cuatro puertas de la ciudad. Para finalizar el día, y no sin antes dar buena cuenta de unas ricas tapas y unos exquisitos dulces caseros, fuimos a ver el torneo que se había organizado en el campo de fútbol. Caballeros vestidos con las ropas típicas y los caballos engalanados debidamente, distintas pruebas de destreza con las armas que existían en aquellos tiempos y un público entregado con los diferentes participantes hicieron de esta actividad un momento de risas, aplausos y abucheos, según el momento. Acabamos todos en el campo, haciéndonos fotos con los protagonistas y disfrutando de la majestuosidad de los caballos.
Y hasta aquí nuestro día en las Capitulaciones, un evento que cuenta con un sinfín de actividades durante todo el fin de semana. Así que si aún no has ido, el próximo año te esperan.
«Las cosas suplicadas e que Vuestras Altezas dan e otorgan a don Christóval de Colón, en alguna satisfacción de lo que ha descubierto en las Mares Océanos y del viage que agora, con el ayuda de Dios, ha de fazer por ellas en servicio de Vuestras Altezas, son las que se siguen.
Capitulaciones de Santa Fe, 17 de abril de 1492
Imágenes: Jesús Simón